top of page
  • Instagram
  • Facebook icono social
  • Twitter

Una atribución apócrifa

  • Foto del escritor: Ulrica Revista
    Ulrica Revista
  • 27 abr
  • 8 Min. de lectura

Borges, Bernardo Haedo y «El club de los mendigos»


Nota principal - Edición N44

Por Gonzalo Lopez Martinez



El 12 de agosto de 1933, Crítica publicó el primer número de un suplemento literario que llevó el nombre de Revista multicolor de los sábados (RMS)[1]. El director del diario, Natalio Botana, había designado a Ulyses Petit de Murat para encargarse del nuevo proyecto y le había encomendado la búsqueda de un colaborador. Ulyses propuso a Jorge Luis Borges para el puesto, ya no de colaborador, sino de codirector. Borges había escrito poemarios y varios ensayos sobre Joyce y Quevedo, el oficio del traductor y el ejercicio de la lectura, Whitman y Flaubert, pero no había terminado de incursionar en la narrativa. Botana le advirtió que los temas de la revista versarían sobre piratas, fantasmas, estafadores, leyendas orientales y recónditas. Borges se acercó, de ese modo, a un mundo en el cual la escritura tenía la inmediatez de la prensa. Tomó distancia de sus viejos hábitos y se embarcó en algunos nuevos: escribió por encargo, corrigió, tradujo y reescribió; se convirtió en un copista de historias ajenas; ejercitó la libertad de escritura. A esos textos los firmó con su nombre completo, con sus iniciales, con seudónimos e incluso dejó algunos sin firmar.

Unos sesenta años más tarde, en 1995, una publicación reavivó el interés por los primeros años de su carrera literaria. La investigadora Irma Zangara, con el aval de María Kodama, publicó el libro Borges en Revista multicolor y sacó a la luz una serie de textos que no habían sido publicados en vida por Borges, incluyendo relatos sin firma, reseñas bibliográficas, traducciones y varios escritos firmados con una variedad de seudónimos: José Tuntar, Bernardo Haedo, Andrés Corthis, Benjamín Beltrán, Pascual Güida y Alex Ander. La aparición de Borges en Revista multicolor agregó más de una veintena de textos carentes de firma o bajo seudónimo al corpus de la obra borgesiana[2] que han suscitado innumerables debates y controversias en torno a la legitimidad de atribuir estos relatos a la pluma de Jorge Luis Borges.



La importancia de llamarse Haedo

Entre los seudónimos que se le atribuyeron, resulta de particular interés el de Bernardo Haedo. Este nombre no es arbitrario en el universo borgesiano, sino que guarda una estrecha relación con el linaje materno del escritor. La madre de Borges, Leonor Acevedo, era prima de Francisco Haedo, un hacendado uruguayo. Este vínculo familiar tiene implicaciones en la obra y la vida de Borges. Es conocido que, durante su juventud, Borges solía pasar los veranos en la estancia de los Haedo, ubicada en Salto, Uruguay. Estos períodos tuvieron un impacto profundo en la imaginación y la producción literaria del escritor. El paisaje y las experiencias vividas en aquellas tierras uruguayas sirvieron como fuente de inspiración para algunas de sus obras más célebres. Un ejemplo notable de esta influencia es el cuento Funes, el memorioso, donde el paisaje rural uruguayo sirve como escenario, incluso llama Bernardo Haedo a un personaje que oficia de primo del narrador. La mención de un nombre tan estrechamente ligado a su historia familiar en una de sus obras de ficción más reconocidas añade una capa adicional de complejidad al debate sobre la autoría de los textos firmados bajo este seudónimo. Estas condiciones resultaron suficientes para que Zangara adjudicara los textos firmados por Bernardo Haedo a la pluma de Borges.

Durante el período en el que se editó la RMS, aparecieron cuatro textos firmados con el seudónimo de Bernardo Haedo: «Renacen en el siglo XV Adán y Eva», «La sórdida casa de los millones», «El club de los mendigos» y «Los piratas del Panda». Ariel de la Fuente publicó una nota de investigación[3] acerca del cuento «La sórdida casa de los millones» que demostró, con la prueba irrefutable del texto original, que Borges no era su autor. Este descubrimiento nos llevó a analizar el resto de los textos y tras realizar una exhaustiva búsqueda bibliográfica, nos encontramos ante una situación similar a la del caso revelado por de la Fuente, pero esta vez con el relato «El club de los mendigos». Esta historia se publicó el 16 de diciembre de 1933 en la página 4 de la RMS. El cuento ocupaba media página vertical y fue acompañado por dos ilustraciones realizadas por Pablo Rojas Paz. «El club de los mendigos» está narrado en primera persona y gira en torno a la existencia de una sociedad secreta que agrupa a mendigos provenientes de Irlanda. Esta organización, conocida como el Círculo de Saint-Giles, es presentada como una entidad misteriosa y con reglas estrictas. La trama se centra en el momento en que uno de sus miembros más destacados, Arnold Conrad, decide abandonar el club tras enamorarse de una mujer perteneciente a la alta sociedad londinense.

Nuestra búsqueda reveló que «El club de los mendigos» no es un escrito original, sino una traducción del francés de un relato titulado «Le club des mendiants», cuyo autor es Louis Lurine. El texto original de Lurine forma parte de una colección de relatos titulada Ici l'on aime, publicada en París en 1854. Este descubrimiento es determinante por varias razones. Por un lado, establece indudablemente que el texto publicado en la RMS no es una creación original de Borges. Por otro lado, el hecho de que la fuente original no fuera citada en la publicación de la RMS convierte esta contribución en un caso de plagio. Sobre este punto, es conveniente recordar lo que el mismo Borges reconoció al hablar sobre aquel suplemento literario: «No había derechos de autor, entonces. Los autores cobraban en fama, nada más, no en dinero. Podía hacerse una excelente revista con recortes»[4]. Aunque esta confesión, parece referirse a los textos de autores de renombre publicados en la RMS, la publicación de escritos traducidos sin la mención del autor original no deja de ser un plagio.


Los mendigos semejantes

Para comprender mejor la naturaleza de esta traducción y su relación con el texto original, realizamos una comparación entre «Le club des mendiants» de Lurine y «El club de los mendigos» de Bernardo Haedo. Este análisis reveló algunos aspectos interesantes. En cuanto a la extensión, los textos difieren significativamente. El original francés de Lurine supera las cuatro mil palabras, mientras que la versión publicada en la RMS es considerablemente más breve: no llega a las dos mil palabras. Esta reducción sustancial en la longitud sugiere que el proceso no fue una mera traducción, sino que implicó una adaptación y edición considerable del texto original.

En cuanto a la estructura narrativa, encontramos algunas diferencias notables. En «Le club des mendiants», Lurine enmarca la historia como una «antigua carta a una amiga» («vieille lettre à une amie»). Este formato epistolar se refleja en el uso frecuente del tratamiento de cortesía «Madame» a lo largo del texto. En contraste, la versión publicada en la RMS adopta un enfoque narrativo diferente. El narrador se dirige a un público plural, como se evidencia en frases como «Ustedes le darán el desenlace que prefieran». Esta modificación en la voz narrativa altera sutilmente la intimidad y el tono del relato.

Otros cambios, aunque menores, son igualmente significativos. Por ejemplo, el nombre del protagonista se modifica: en el original francés es Daniel Robsart, mientras que en la traducción se convierte en Arnold Conrad. Es interesante notar que, en ambas versiones, el narrador hace explícita su decisión de nombrar azarosamente al personaje. Los lugares mencionados en la historia se mantienen en gran medida: Londres, Irlanda, el barrio de Saint-Giles (Saint- Gilles en el original francés), el hotel Piccadilly. Estos elementos geográficos conservados contribuyen a mantener la atmósfera y el escenario originales del relato.

Hacia el final de la historia, encontramos otra modificación sutil, pero reveladora. En la versión original, el narrador sugiere que el teatro se encargaría de unir a Daniel y a lady Elmowd en matrimonio, y que el protagonista se convertiría en miembro de la Cámara de los Comunes. La traducción publicada en la RMS mantiene la esencia de este final, pero reemplaza la referencia al teatro por el cine, y cambia los nombres a Arnold y lady Welbrook. Este ajuste podría interpretarse como un intento de modernizar ligeramente el relato para el público argentino de la década de 1930.


A modo de conclusión: no todo es Borges

El análisis detallado de «El club de los mendigos» y su comparación con el texto original de Louis Lurine nos lleva a una conclusión inequívoca: la atribución de este escrito a Jorge Luis Borges es errónea. Este hallazgo tiene implicaciones significativas no solo para este texto en particular, sino para el conjunto de textos firmados con seudónimo y atribuidos en Borges en Revista multicolor. En primer término, podemos considerar que, si «El club de los mendigos» resultó ser una traducción sin referenciar de una obra preexistente, es razonable cuestionar la originalidad y la autoría de los demás textos asignados en circunstancias similares. En segundo término, este caso plantea interrogantes importantes sobre las prácticas editoriales y de atribución en la época en que estos textos fueron publicados. La ausencia de una mención del autor original, Louis Lurine, sugiere que las normas de citación y reconocimiento de fuentes eran posiblemente más laxas o diferentes de las que se aplican en la actualidad. Este hallazgo nos invita a reflexionar sobre la complejidad de la obra temprana de Borges y los desafíos que presenta para los investigadores. La diversidad de estilos y temas en los textos adjudicados a Borges durante este período podría explicarse, al menos en parte, por la inclusión de obras que no son de su autoría. Para reconocer qué textos pertenecen a Borges y cuáles no, es necesario contar con un conjunto de competencias: «larga experiencia de frecuentación profesional de los escritos y del estilo de Borges, fino arte de la abducción literaria, acceso a una amplísima información sobre las costumbres editoriales del momento y de la revista»[5] como bien sugieren Almeida y Parodi en «Editar a Borges». De modo que es posible afrontar la faena de atribuir con seriedad la autoría de textos bajo seudónimo a Borges.


NOTAS:

[1] Puede consultarse la colección completa en el sitio web del Archivo histórico de revistas (AHIRA).

[2] Comparto las razones expuestas por Pedro Barcia en «El adjetivo más adecuado» para referir a la obra como borgesiana antes que borgeana.

[3] En la nota «Un texto erróneamente atribuido a Jorge Luis Borges: 'La sórdida casa de los millones'», de la Fuente compara el texto publicado en la RMS con el original en francés titulado «Rothschild» y firmado por Eugène de Mirecourt.

[4] La extensa conversación con Antonio Carrizo fue recogida en Borges, el memorioso. Fue una de las pocas ocasiones en las que Borges recordó amablemente su paso por el suplemento del diario Crítica.

[5] Los autores elaboran esta sugerencia para olvidar la «bochornosa» publicación de Borges en Revista multicolor.


FUENTES:

ARCHIVO HISTÓRICO DE REVISTAS. (20 de marzo de 2025). Revista multicolor de los sábados. https://bit.ly/3ERzjdX

BARCIA, P. L. (2022). «El adjetivo más adecuado». Ulrica: libros y literatura, III (26), 9. https://bit.ly/4cufq8v.

DE LA FUENTE, A. (2016). «Un texto erróneamente atribuido a Jorge Luis Borges: 'La sórdida casa de los millones'». Purdue e-Pub. https://bit.ly/3RkZlKd.

LURINE, L. (1854). Ici l'on aime. París: Victor Leocu. https://bit.ly/4iyCDK9

MIRECOURT, E. DE (1855). Les Contemporains. Paris: Gustave Havard.

ZANGARA, I. (1995). Borges en Revista multicolor. Buenos Aires: Atlántida. 





(Puerto Madryn - Argentina) Bibliotecario jurídico, corrector de textos y cicloculturista. Ha presentado trabajos referidos a la legislación de bibliotecas escolares en foros nacionales e internacionales. Actualmente trabaja en una investigación acerca de los pseudónimos atribuidos post-morten a Jorge Luis Borges.

Comments


¡Gracias por suscribirte! Todos los meses vas a recibir tu número totalmente gratuito

ISSN 2718-7543

© 2023 por Ulrica. Proudly created with Wix.com

bottom of page