Por Gisela Paggi
THOREAU, Henry D.: Primavera. Ediciones Godot. Buenos Aires, 2022. Trad.: Natalia Barry.
Deméter hacía brotar la primavera cada año cuando podía reunirse con su hija, Perséfone, que había sido raptada por Hades. 6 semillas de granada fueron las que determinaron que la tierra pudiera llenarse de frutos y flores en esos meses de felicidad maternal y que se viera estéril y desolada cuando se hallaban separadas la una de la otra.
Henry David Thoreau observó este paso de la fría esterilidad a la fecundidad del color en esa vida natural que se decidió a llevar. Primavera es un libro editado por Editorial Godot en el que Peter Saint-André selecciona fragmentos de sus diarios, escritos y correspondencia donde escribió sobre esta estación y las transformaciones que ocasionaba en el paisaje y en la vida de las personas.
El hombre frente a la naturaleza ha sido una batalla de larga data en la historia de la humanidad. Sin embargo, las revoluciones más profundas suceden, no en el resultado de esa batalla, sino en el encuentro respetuoso, amoroso, que pueda darse entre ambos. La naturaleza como compañera para entender verdades universales e, incluso, las particularidades de cada hombre.
Alejado de una sociedad que le resultaba demasiado incómoda y fascinado por la historia de las ciencias naturales, Thoreau encuentra su lugar en la vida bucólica. Entiende que el remedio para una sociedad enferma está en el regreso a la naturaleza y que Dios es el hacedor de un milagro que el hombre no debe menospreciar.
Cada uno de estos fragmentos es fruto de una profunda observación del paisaje. Pero hablamos de una observación hecha con amor. Es Thoreau ante lo inconmensurable de la naturaleza en constante transformación. Desde el color metamorfo de las hojas que se acompaña de un renovado trinar de aves, hasta la prolongación de los días y la adaptación de su rutina. La primavera es, en estos fragmentos, la musa que lo invita a reflexionar y a dejarse sorprender por la vida. Es la alegría de Deméter en el cuerpo de un hombre. Leer este libro es caminar de la mano de la Thoreau por ese paisaje floreciente que transitó y admiró.
Para ampliar el combo:
Este recomendado es el cierre de un interesante tríptico. Por eso, te recomiendo los otros dos del conjunto:
Pájaro de invierno, de Katherine Mansfield (Aditorial Maravilla, 2021. Trad.: Laura Wittner): Poemas íntimos y naturales, lúcidos a pesar de su corte clásico. Delicados e intuitivos. Conectados con su mundo.
La orilla que se avisma, de Juan L. Ortiz (Losada, 2011): El Litoral argentino en todo su esplendor en un libro de poemas que pueden olerse y sentirse en cada flor de jacarandá o en el bramido del río Paraná.