1
floto
sobre mi espalda
ojos cerrados
panza arriba bajo el sol
mi cuerpo deja de ser materia sólida
ya no tengo conciencia sobre mi peso
me siento una
aguaviva
floto
se me tapan los oÃdos
¿qué pasarÃa si permito que este cuerpo
se hunda?
ahora entiendo por qué los marineros
se enamoraban de las sirenas
qué fácil serÃa dejarse llevar
por una mujer hermosa
hasta el fondo
2
podrÃa decirte que todo es perfecto
que ya no lloro a la noche cuando las luces se apagan
pero sólo puedo dormir
si la tele está prendida
podrÃa decirte que todo es perfecto
volvà a salir a la calle
volvà a mantener conversaciones con desconocidos
sólo para demostrarme que mantengo la capacidad
de relacionarme con ternura
pero este cuerpo dejó de ser mÃo
cuando aprendà a quererme desnuda
sólo cuando vos me mirás fijo
podrÃa decirte que todo es perfecto
estoy en un avión a punto de aterrizar
atravesamos las nubes al atardecer
ya no pido en silencio que el motor se detenga
pero un bebé llora en el asiento de al lado
3
lo que me tranquiliza
es saber que el mundo va a seguir
es mentira que las civilizaciones caen
quienes caen son los gobernantes
lo que se pierde son
sistemas enteros de escritura
pero
la gente común sigue ahÃ
a la espera del próximo resurgimiento
la gente va a seguir
en su pequeño mundo
labrando la tierra
trabajando la arcilla
los niños van a seguir
jugando con sus muñecos
y miles de años más tarde
nosotros vamos a leer en un pequeño libro de
la Historia de la Humanidad
acerca de sus sistemas
y de sus gobernantes
acerca de cómo esa o aquella civilización
logró hacer cosas hermosas
4
me acuerdo la primera vez que vi mi casa quemada me acuerdo de haber entrado a la habitación que ya no tenÃa techo y mirar para arriba a los árboles moviendo sus ramas y los dibujos que quedaron impresos en las paredes y el olor a que habÃa pasado algo terrible y me acuerdo haber pensado cómo puede ser que esto sea tan hermoso
5
estábamos caminando por la orilla del rÃo y yo miré al otro lado y vi muchos árboles y te pregunté qué hay del otro lado del rÃo y vos me respondiste creo que nada te quedaste pensando por varios minutos y al final dijiste aunque después de la nada tiene que haber algo
(Buenos Aires – Argentina) Bianca Zunino (1998) Nació en 1998 en la Ciudad de Neuquen, en la que creció. Reside en la Ciudad de Buenos Aires desde 2017. Estudia la Licenciatura en Artes de la Escritura en la UNA (Universidad Nacional de las Artes). Pasó por varios talleres y actualmente toma clases con la tallerista Zaira Nofal. Su primer poemario, La enredadera, es la más reciente novedad de Hexágono Editora.